Quizá alguna vez te has encontrado en la situación de tener que realizar diseños para imprimir en carteles, lonas… y te las has visto y deseado para lograr la calidad necesaria.
No hay nada que haga deslucir más una imagen que una impresión deficiente. Sin embargo, muchas veces el problema no está en la impresión, puede darse en el proceso previo de creación, en la fase de diseño y creación. Desde Ferysu vamos a explicarte todo lo que debes tener en cuenta antes de pedirnos imprimir un póster o cualquier producto publicitario.
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Consejo número 1. Comprueba el color
Quédate con este detalle. Antes de solicitar la impresión, comprueba que tu diseño está preparado en color CMYK, en lugar de en RGB. Si no sabes cómo, trata de acudir a programas como Photoshop, trabaja con aquellos que te permitan cambiar la tipología. Lo mejor es abrir los diseños con un software que se adecue a la impresión y permita utilizar colores como CMYK o colores web, para que no se vea afectada la reproducción en diferentes formatos. Si trabajabas con Photoshop y tras cambiarlo se produce algún fallo o se alteran tus colores, busca la pestaña “Amenaza Gamut” para corregir los tonos.
Algo que además debes tener en cuenta en cuanto a esto es que los colores con los que trabajas en el ordenador, la gama que te permite, puede sufrir ligeros cambios en tinta real. Esto es debido a las pantallas, que son un soporte completamente distinto al papel, y cuentan con luz extra que cambia los tonos. La mayoría de impresoras trabajan en inyección de tinta, por eso es importante respetar dicha tecnología.
Puede que tu diseño requiera ser utilizado en diferentes formatos y adaptarse a ellos. Por ello, y para evitarte más trabajo, es importante que crees siempre vectores y utilices colores universales. Si el material del que dispones te obliga a trabajar en baja calidad, es importante saberlo y advertir a los implicados o buscar una alternativa.
Consejo número 2. Presta especial atención a la resolución
Normalmente, los ficheros para imprimir pósteres se definen por su gran tamaño. De no ser así, es probable que el resultado sea pixelado y poco nítido. Lo más recomendable es ajustar el fichero a 300 DPI (puntos por pulgada), de esta manera, y cuanto mayor sea el número de puntos en la imagen, la resolución final será mucho mejor.
Si por algún caso no puedes utilizar el diseño vectorial, existe una solución. Se puede trabajar con escalas, jugando con el tamaño, la resolución y el soporte.
Si, por ejemplo, trabajáramos un cartel en cartón pluma de 200 x 200 cm diseñado con Photoshop, lo idóneo sería un lienzo de 200 x 200cm a 300 dbi en CMYK. De esta manera, el resultado que obtendríamos al finalizar nuestro diseño sería ideal, pero con demasiado peso. Incluso para llevar a cabo el trabajo en el ordenador, nos ralentizaría y serían necesarios más recursos. Por tanto, la solución perfecta es disminuir la resolución del archivo y el tamaño de forma proporcional a un 50%. De esta manera, los archivos serán más manejables y en imprenta no se notará la variación. Pudiendo poner el lienzo de 200x200cm a 100 dbi o uno de 100x100cm a 150 dbi.
Otro punto a tener en cuenta será el soporte. Si el trabajo a realizar se pretende para una lona micro perforada, se podrá bajar más la resolución que si se trabaja para un vinilo.
Consejo número 3. Cuida las medidas
En el caso de trabajar un póster, debes recordar que las medidas que se utilizan para imprimir a tamaño póster suelen ser o bien 70×100 cm o 35×50 cm. De ahí la insistencia en trabajar en la medida de lo posible con un archivo vectorial, ya que posteriormente puede ampliarse al tamaño que consideres sin ningún problema. En cuanto al papel, desde Ferysu trataremos de asesorarte según tus necesidades, pudiendo elegir el grosor y acabado que más te convenza.
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Consejo número 4. Las fuentes también son importantes
La mayoría de carteles impresos se diseñan para llamar la atención y ser legibles a grandes distancias. Es fundamental que en un primer vistazo se reconozcan las palabras clave y los símbolos o puntos que queremos destacar. El titular debe acaparar todo tu esfuerzo en el diseño, es lo primero que se lee. Dispones de apenas 2 segundos para captar la atención con él. Letras claras, que contrasten bien con el fondo y que no parezcan un pegote, que estén en equilibrio con la imagen para poder transmitir el mensaje al completo.
Consejo número 5. Realiza una prueba final antes de imprimir
Desde Ferysu queremos darte los mejores consejos para llevar a cabo tu diseño. Por eso, nuestro tip infalible a la hora de dar por finalizado tu trabajo, es que te alejes de la pantalla algunos metros. Comprueba la claridad del proyecto desde un punto de vista más lejano. Si tienes posibilidad de imprimir el trabajo en escala, hazlo, aunque sea pequeño, para comprobar cualquier tipo de error en color, ortografía, maquetación… Casi siempre se pueden hacer mejoras.
Si tienes cualquier duda sobre impresión, no dudes en contactar con nosotros. En Ferysu estaremos encantados de atenderte.